En condición de local, la oncena de Alianza Lima solo pudo igualar a dos goles con el colero del campeonato, el Cobresol de Moquegua, en un partido que pudo terminar en una gresca generalizada, de no ser por la oportuna intervención de la Policía.
A los 42 minutos del segundo tiempo, Sipirán enmudeció el estadio de Matute al poner el 2-1 para Cobresol, de un fuerte disparo que dejó sin chance al portero blanquiazul George Forsyth.
Los moqueguanos no terminaban de celebrar, cuando en la siguiente jugada, un centro desde la derecha de los aliancistas, generó que arquero Michael Sotillo descolgara de forma deficiente el balón, introduciéndola en su propio arco, ante la arremetida de Donny Neyra.
Inmediatamente después, los jugadores de Cobresol salieron a reclamar al árbitro, aduciendo una carga ilegal de Neyra, pero las imágenes de televisión mostraron que el guardameta Sotillo chocó contra uno de sus defensas.
A partir de ese momento los ánimos se caldearon, y una jugada por la derecha de Guerrero (Alianza) motivó una falta artera de Tordoya (Cobresol), lo que generó un conato de bronca, con manotazos y empujones de por medio.
El incidente culminó con las expulsiones de Tordoya (Cobresol) y Guerrero (Alianza Lima).
Los blanquiazules se pusieron en ventaja en el primer tiempo con gol del juvenil delantero Jhonny Vidales a los 22 minutos, y con ese marcador se fueron al descanso.
Apenas iniciado el segundo tiempo, Cobresol puso la paridad en el marcador con tanto de Enahoro, mediante una “palomita” dentro del área.
El cuadro íntimo de La Victoria se fue con todo al ataque, tratando de hacer respetar la casa, pero fue sorprendido con el tanto de Sipirán, a pocos minutos del final.
Con este resultado, Alianza Lima suma su noveno partido sin conocer la victoria, lo que tiene preocupados a la dirigencia y al cuerpo técnico que dirige José “Pepe” Soto.
Fuente: [Andina].
